El Dr. Guillermo Alvarado Induni, geólogo, miembro de la Academia Nacional de Ciencias impartió la conferencia “La última Edad del Hielo en Costa Rica”.

El Dr. Alvarado labora para la Comisión Nacional de Prevención de Riesgos y Atención de Emergencias (CNE), es Profesor de la Universidad de Costa Rica e investigador en la Red Sismológica Nacional. Su especialidad es la Vulcanología-Neotectónica-Geología del Cuaternario.

La mayor parte de su labor profesional la ha realizado en América Central desde 1984 en diversos campos de la geología. Por su experiencia y continua actualización, ha colaborado desde 1989 con la Comisión Nacional de Prevención de Riesgos y Atención de Emergencias (CNE) y es donde labora actualmente. Bautizado por algunos periodistas como "El Señor de los Volcanes", ha recibido varios reconocimientos por parte de la Universidad de Costa Rica y el " Premio Geológico Nacional" 2009.

La última Edad del Hielo no solo aconteció en el hemisferio norte sino también en Costa Rica, la cual abarcó desde los 80 000 años hasta los 11 000 años atrás, aproximadamente. Dicho periodo se caracterizó por varios aspectos: Una glaciación extensa a lo largo de todo el hemisferio norte del planeta, con la cual también descendió el nivel del mar entre unos 120 y 160 metros, que conllevó a un aumento del territorio de lo que actualmente llamamos Costa Rica en un área de más de un 20% de  lo que conocemos, además, el páramo se extendió y aproximadamente un 40 km2 de nuestro país estaban cubiertos de hielo y algunos volcanes altos como el Irazú y el Turrialba posiblemente estuvieron nevados.

No solo los páramos se extendieron, sino que también los bosques de los volcanes se intercomunicaron, es decir se formó un corredor entre los volcanes; pero con el cambio del clima a partir de 11 000 años a hoy en día, que es mucho más cálido, estos volcanes quedaron como islas biológicas con fauna y flora particular.

Otro aspecto importante es la megafauna, que hoy en día está extinta, grandes animales herbívoros y carnívoros como, por ejemplo, el perezoso gigante, algunos grandes mamíferos de la talla de los rinocerontes, armadillos gigantes, entre otros, vagaban por el territorio nacional. Esta megafauna se extinguió al final de la última glaciación, justo en ese momento los seres humanos arribaron al continente americano ya sea por el Estrecho de Bering o por Australasia y este fue el que muy probablemente contribuyó a la extinción de gran parte de esta megafauna.

Se habla también de los “anacronismos” biológicos y explica algunos casos de como algunas plantas, árboles e incluso animales pudieron sobrevivir con la extinción de esta megafauna, por ejemplo, el caso del aguacate y de algunos árboles espinosos.

El Dr. Guillermo Alvarado explica que diferentes paleontólogos han encontrado en CR restos fósiles de dicha megafauna, y también que existe un gran ámbito de investigación para los futuros jóvenes y las nuevas generaciones. Por ejemplo, hay algunas partes altas que no se sabe con certeza si estuvieron cubiertas de glaciares en el sentido estricto o si simplemente estuvieron nevadas; esos son aspectos que se deben de investigar hacia el futuro.

 “Existe una teoría que indica como Toro Amarillo pudo haber sido el último reducto de América Central del bisonte americano, eso queda como un ejemplo de cómo se pueden unir todas estas partes del rompecabezas: la arqueología, la biología, la paleontología, el clima antiguo y las leyendas; todo ello se puede acoplar para reconstruir una historia. Faltan muchas cosas por investigar y es un terreno fértil para los estudiantes, para generar todo este bagaje de conocimiento de lo que es la Costa Rica de hoy en día y cómo era nuestro país hace 17000 años cuando estaba inmersa en un frío glaciar” Dr. Guillermo Alvarado Induni.